Raúl Ruiz (Puerto Montt, Chile, 1941 -París, Francia, 2011) fue un cineasta chileno y un teórico del cine radicado en Francia, país en el que se exilió luego de que ocurriera en Chile el golpe de Estado de 1973. Formó parte de una generación de directores chilenos que cambiaron el cine nacional, aportando una renovación del lenguaje cinematográfico, en consonancia con lo que ocurría en el resto de los países de América Latina y ya había acontecido en algunos países europeos. 

Ruiz dirigió más de 200 obras cinematográficas, en las que ocupó todos los soportes técnicos (35mm., 16mm. o video) y diversos formatos narrativos. Fue así como incursionó indistintamente en producciones de bajo presupuesto, películas para televisión, miniseries y largometrajes de gran producción, en los que dirigió a estrellas europeas y norteamericanas.

Gradualmente se le catalogó como un autor distinto, que creaba películas cada vez más creativas, surrealistas, irónicas, oníricas y experimentales. Hoy, es considerado como el cineasta chileno más importante de la historia, y en el cine mundial brilla por su originalidad y productividad, ya que su filmografía es inmensa y abarca diversos géneros y duraciones.

Cabe destacar que una vez terminada la dictadura, regresó periódicamente a Chile. En esos años comenzó a realizar actividades diversas: escribió novelas, cómics, dictó conferencias en universidades, y realizó instalaciones en galerías y museos.

Es en estos tipos de trabajo donde aún se guardan memorias misteriosas y experiencias marginales respecto de su “obra mayor”, lo que ha interesado a investigadores y académicos como Francisca García y Érik Bullot, cuyo papel ha sido fundamental en la reposición de Todos los males del mundo en el contexto de la 15 Bienal.